El volante central de Unión y Fraternidad campeón entrerriano de la categoría 2009, Federico Bonnin, fue determinante en el partido final que consagró campeón al azulgrana de San Salvador, en un título histórico para el fútbol juvenil de San Salvador.
Cuando el partido estaba cuesta arriba, por el dominio de Independiente, una falta afuera del área, le permitió a Federico Bonnin empatar el partido.
En el minuto 24 se acomodaron frente a la pelota Agustín Cracco y Federico Bonnin. El delantero pasó por arriba del balón y Bonnin le pegó con fuerza y dirección por arriba del arquero, de emboquillada para meter la pelota bien arriba, inatajable para el 1 de Independiente.
Gol, corrida, algarabía, emoción, abrazos y la sensación que el título estaba cada vez más cerca.